El exjefe de gabinete Aníbal La Morsa Fernández siempre dijo que desconocía a Martín Lanatta, uno de los condenados por el triple crimen de General Rodríguez, y que vinculó en declaraciones a la Justicia al exfuncionario con el tráfico de efedrina. Pero se supo que ambos compartían abogado: Gustavo Frasquet, de íntima confianza del exintendente de Quilmes. Se trata del mismo letrado que defendió durante muchos años a Lanatta en juicios tramitados en los juzgados de Quilmes. Frasquet defendió a Lanatta en la causa número 15546 tramitada en el juzgado civil y comercial número 6 de Quilmes, a cargo del juez Omar Alberto Nicora. En ese expediente, el recapturado Lanatta le pide 105 mil dólares a una persona llamada José Ernesto Amado. Se trata de una deuda que se habría generado, según el denunciante, por un intercambio comercial equivocado de una propiedad de Quilmes. De acuerdo a los registros de los juzgados de Quilmes, el 17 de noviembre del 2009 Martín Lanatta hizo un "cambio de patrocinio" ya que, en ese momento, el estudio jurídico de Frasquet dejó de defenderlo. Y empezó a ser defendido por Stella Maris Rizzo. En agosto pasado Martín Lanatta admitió que su jefe en el tráfico ilegal de drogas y armas había sido Fernández, a quien llamaba "La Morsa" junto a sus cómplices, lo que fue ratificado y ampliado ante la Justicia. El exfuncionario rechazó todo esto. Es el mismo Frasquet quien, además, defendió al excomisario Juan José Ribelli en uno de los juicios por el atentado a la AMIA. Y es el mismo Ribelli quien representa a Esteban Ibar Pérez Corradi, quien está acusado de ser el autor intelectual del Triple Crimen.

FUENTE: DIARIO HOY