Un albañil, cuyo nombre no trascendió porque quiere preservar su identidad, dio a conocer los planos de los escondites que ordenó construir el empresario Lázaro Báez para ocultar el dinero y los objetos de valor en dos estancias de su propiedad: La Julia Río Bote y Cruz Aike.                                                                             Según el testimonio del obrero, construyó espacios ocultos como entretechos o paredes dobles en esas dos viviendas del dueño de Austral Construcciones. "Están por todos lados en esas estancias. Yo mismo los hice", aseveró el hombre al fotógrafo enviado del diario Clarín a Santa Cruz, Maxi Failla. "Trabajo como albañil y carpintero, y conozco cada milímetro de esas dos estancias", precisó.         "En estos lugares me hicieron modificar ventanas, puertas y el hogar a leña. En varios de los ambientes también había entrepisos realizados por otros albañiles, y huecos que fácilmente se pueden tapar para que pasen inadvertidos como si se tratara de las paredes originales. Si Báez guardó plata en algún lado, es ahí", detalló el carpintero.                                                        Ayer la Justicia realizó allanamientos en Cruz Aike con excavadoras donde se encontró tierra removida, que según los investigadores indicaría que algo fue extraído del lugar. El operativo fue dirigido por el fiscal federal Guillermo Marijuan, quien explicó: "Nos parece poco probable que no hayan removido lo que escondían. Igualmente no lo descartamos, estamos haciendo muchas medidas. Hay un lugar que nos interesa particularmente en una estancia, porque hay tierra removida".                                                                                                                             El trabajador precisó que tras el fallecimiento del ex presidente Néstor Kirchner se realizaron varias modificaciones en 'La Julia': "Después de eso la estancia fue cercada, iluminada y protegida con alarmas por todos lados", señaló. Y agregó: "Debajo del living está la cochera que menciona Leonardo Fariña en su declaración. Vamos a ver qué encuentra el fiscal. Porque en ese garage, detrás de una puerta hay un sector de unos 300 metros cuadrados, donde tranquilamente se podrían guardar cosas de todo tipo y tamaño.    

Fuente:  Perfil